Tema de Portada

Acogida clamorosa en el Instituto Técnico Ricaldone.La fiesta de Don Bosco arrancó con la celebración eucarística en los patios del Colegio Santa Cecilia. La misa fue presidida por mons. Oscar Julio Vian, arzobispo de Quetzaltenango. Lo acompañaban mons. Elías Bolaños, obispo de Zacatecoluca y varios sacerdotes. Asistieron numerosos alumnos y alumnas de las obras educativas salesianas y de otras congregaciones religiosas o gubernamentales.
Al finalizar la misa, la urna con Don Bosco fue trasladada hacia el Instituto Técnico Ricaldone, en San Salvador. En el trayecto se tuvo una breve parada en la nunciatura.

La recepción de Don Bosco en el Ricaldone tuvo un sabor a oratorio festivo. Dos gigantes en zancos con atuendos de payasos marcaron el tono jocoso de los tiempos en que Don Bosco entretenía a sus jóvenes con esas artes. Banda musical, desfile de carteles salesianos y mucho jolgorio alimentaron el bullicio de los casi dos mil alumnos instalados en las graderías.

La espera de la urna nunca los cansó.Don Bosco comenzó su última etapa de peregrinación por Centro América llegando al aeropuerto militar de Guatemala capital a las 5.00 pm. Fue recibido por el vicepresidente de la república, Rafael Espada, el arzobispo card. Rodolfo Quezada,  el nuncio apostólico mons. Richard Gallagher y personalidades del gobierno.

En la Plaza del Obelisco más de dos mil personas recibieron a Don Bosco con extraordinario júbilo.

La urna fue llevada en una carroza ricamente adornada hacia la Universidad Mesoamericana donde fue recibidq por numerosas personas que habían elaborado durante horas bellas alfombras multicolores en la calle principal.

Llega la urna y la conmoción juvenil se desata.Los guatemaltecos (o chapines) llevan en la sangre el arte de elaborar alfombras con aserrín fino combinado con colores llamativos y elaborados dibujos alusivos a temas religiosos. La composición de una alfombra es una tarea colectiva, que puede ser el fruto de una familia, un barrio, una cofradía, un grupo de amigos o los alumnos de un grado. Sobre todo en semana santa, en todos los poblados, grandes y pequeños, la mayoría de la población se entrega afanosa a construir estas obras de arte colectivo. El trabajo exige largas horas, generalmente nocturnas. Es un arte fugaz, pues se crea como alfombra para el paso de una procesión. Los pies de los cargadores del santo disuelven en un instante lo que costó un laborioso ejercicio.

“Me basta que sean jóvenes para amarlos”.Por la mañana a las 6:30 am ya todos los alumnos del Don Bosco de Guatemala estaban reunidos alrededor del patio. Se sacó la urna al centro del mismo y los muchachos la rodearon con una espiral humana. Al centro, Don Bosco y alrededor los 1600 alumnos del Colegio. La espiral se transformó en un corazón gigante que cantaba al Santo de la Juventud. Luego se pasó al Templo donde se celebró una conmovedora misa de despedida.

Después hubo una segunda misa en la que participaron alumnos de varios centros educativos de la ciudad capital.

Celebración eucarística bajo la lluvia en el Centro Don Bosco (Carchá).Los latinos decían: Dulcis in fundo (lo sabroso está al final). La jornada de hoy ha sido el culmen festivo de una gira impresionante de Don Bosco por Centro América.

Don Bosco visitó la misión salesiana de Carchá, en Alta Verapaz. Las condiciones eran las menos indicadas para una concentración masiva. Durante toda la noche anterior un aguacero despiadado y pertinaz desaconsejaba cualquier desplazamiento humano. La lluvia siguió igual de intensa hasta el mediodía.

Pero la población de Carchá, ladinos e indígenas por igual, no se acobardan por las lluvias, que son un elemento más de su hermoso paisaje montañoso vestido siempre de verde intenso.

DON BOSCO VISITA CENTROAMERICALa vida de Don Bosco, igual que la obra salesiana, está marcada por una constante: la opción por los jóvenes – a los que llamó “la porción más delicada y valiosa de la sociedad humana – y, en particular, la opción por aquellos jóvenes “pobres, abandonados y en peligro” a los que la sociedad niega oportunidades y, peor aún, castiga y maltrata.

Su vida y su obra estuvieron dedicadas a rescatar a estos muchachos, ayudarles a construir su identidad y su dignidad, ofrecerles nuevas oportunidades y reintegrarlos a una vida plena para ellos y para la sociedad.

Dr. Leonardo Garnier
Ministro de Educación Pública de Costa Rica