cuerpomusical“Un oratorio sin música es como un cuerpo sin alma”. Tremenda frase nos regaló Don Bosco a todos sus hijos, y de manera especial a sus animadores. Qué orgullo debe sentir al vernos hoy y darse cuenta cuán grabada está la música en nuestro “ADN salesiano”.

DB orquestaDon Bosco posa en medio de los alumnos de la Escuela de Música Instrumental del Oratorio. Es una de las pocas fotografías en que elige aparecer sonriente.

violincompoEl mundo de la música es inmenso, como las estrellas del firmamento. No podríamos terminar de explicar, en un artículo, todo lo que implica crear melodías, pero sí podemos hacer comprender su complejidad.

MusicaLlegaCorazonA fines de los años ‘90 los integrantes de grupos juveniles de entonces escuchábamos música “religiosa” solo en las misas, retiros y encuentros juveniles. Los cantos de la celebración eucarística eran generalmente los mismos que cantaron nuestros padres y abuelos.

OSPDBEl Polígono Industrial Don Bosco nació en una zona marginal de San Salvador, capital de El Salvador. Ofrece educación desde primaria hasta bachillerato a 437 niños y jóvenes, ellos y ellas. Cuenta con 8 talleres para la habilitación técnica. El Polígono propone una educación que capacite a los jóvenes a no conformarse con ser simples obreros, sino ser capaces de desenvolverse como empresarios.

testimonios

Familia VargasLa familia Vargas Camacho está compuesta por Daniela, Jeffrey, Ismael y Emma. Todos ellos apasionados por el arte, especialmente la música.

Tony GuidoPido a Dios que me permita llevar su amor a tantos corazones como sea posible

Soy Tony Guido, nací en San José, Costa Rica y crecí en San Isidro de El General junto a mi familia, donde recibí desde pequeño los valores cristianos.

Jean PaulSoy Jean Paul Bethancourt Abrahams, sacerdote salesiano, nacido en Costa Rica. Tengo 35 años. A los nueve, mi mamá me llevó a clases de música en mi barrio donde una señora ofrecía clases de guitarra popular. Allí comencé a aprender canciones rancheras, boleros, trova, acordes y ritmos.

Foto por PantherMediaSellerComo dice el refrán, no hay peor sordo que el que no quiere oír. Negarse a oír puede ser saludable cuando los ruidos son molestos o hasta dañinos.También hay sorderas voluntarias. Se da cuando rehuimos prestar atención a voces que nos provocan. O nos exigen.

Foto: A. Romero CarballoLa escucha no sólo posee el significado de una percepción acústica, sino que está esencialmente ligada a la relación dialógica entre Dios y la humanidad. «Escucha, Israel» es el estribillo repetido con frecuencia en la Biblia (Dt 6,4).