Vida de Oración : Dedicar tiempo a un amigo Ponerse en forma no es fácil. Lo sabemos. Dicen que enero es el mes en que más personas se apuntan a los gimnasios. También dicen que en febrero desaparecen muchos de los que en enero empezaron con muchas ganas. Pues lo mismo puede ocurrir con nuestra vida de oración. Nos gusta, sabemos que es bueno, la necesitamos. Deseamos pasar más tiempo de oración charlando de tú a tú con Jesús. Cuando vivimos esos momentos, los valoramos como un tesoro, como un oasis en medio del desierto. Sin embargo, nos cuesta muchísimo mantener esos momentos en nuestro día a día.

En primer lugar, te diría que no te castigues. Trata de comprender por qué te ocurre eso. Que algo que tanto te encanta y necesitas, no eres capaz de integrarlo en tu día a día. ¿Es por pereza? ¿Por falta de tiempo? ¿Porque realmente no lo consideras como prioridad?

Piensa que los días no tienen más que veinticuatro horas, y las semanas solo siete días. Así que no esperes que te llueva tiempo extra del cielo para encontrar tiempo para rezar. Por eso, más que mirar la agenda o el reloj, conviene mirar el corazón. Sí, explorar el cariño que tienes por Jesús.

Dedicar tiempo a un amigo

¿No nos pasa muchas veces que somos capaces de dejarlo todo por algunas personas y acercarnos a saludarlas? Pues, una manera de conseguir un empujón para ponernos a charlar con Jesús es pensar en cuánto cariño le tengo y si estoy dispuesto a dejar algo para reunirme con él.

Tampoco pienses que, porque no lo dejes todo o no encuentres tiempo, eres una mala persona a la que Jesús no le importa. Así que puedes plantearte lo siguiente: ya que tengo poco tiempo para rezar y cada vez que me lo propongo no lo consigo y, ya que le tengo un gran cariño a Jesús, independiente del mucho o poco tiempo es dedicarle el primer espacio que tenga. Porque una cosa es no tener tiempo y otra muy distinta es tener tiempo y no dedicárselo. ¿No lo crees?

Anímate a vivir esa vida de oración, de relación con Jesús. Pero que sea una relación basada en el cariño. Así descubrirás que el tiempo que puedas dedicar, mucho o poco, será una experiencia más de cariño, en medio de mil actividades, iluminadas también por el amor que Jesús te tiene.

 

 

 

 

Este artículo está en:

Boletín Salesiano Don Bosco en Centroamérica
Tema del mes

Suscríbete a nuestro boletín electrónico y mantente informado de nuestras publicaciones

Suscribirse

Compartir