educardb1Aprender a hablar y aprender a expresarse es un arte necesario para el buen crecimiento de los hijos e hijas. Pero hoy quiero hablar de un arte todavía más difícil y más decisivo: el arte de socializar.

Desde el comienzo de su existencia, y aún sin saberlo, los niños van construyendo su propia actitud de socialización. Aunque no tengan todavía las ideas claras y carezcan de la necesaria autonomía, cada uno de ellos la va desarrollando o limitando de acuerdo a los estímulos o condicionamientos que les toca ir enfrentando. En esa experiencia, la familia se juega buena parte de su credibilidad.