“Estoy asustada y no sé qué hacer. Descubrí que mi hijo se corta los brazos y las piernas con una navaja de afeitar”.
Eso dijo mi amiga al teléfono. No podía sobreponerme a mi asombro. El hijo de mi amiga es un chico listo, tranquilo y muy estudioso.

Mi amiga se enteró con horror que su primogénito llevaba meses cortándose. Con una navaja de afeitar hacía pequeños cortes en sus muñecas y muslos. Dejaba que las heridas sangraran y luego las curaba y tapaba.

En navidad este chico recibió como regalo un teléfono inteligente y una ipad. Estas herramientas lo ayudaron a sumergirse en un submundo de dolor. La aplicación Wattpad, da acceso a una biblioteca mundial ilimitada con libros e historias gratis que pueden leerse incluso offline (sin internet).

Esta permite que los usuarios hagan sus propias historias y las compartan. Este joven había encontrado docenas de autores que hablaban sobre el suicidio y se había unido a varias comunidad de personas que se cortan. Aquí encontró formas de hacerlo para que nadie lo notara, cosas que pueden servir para cortar, como esconder navajas y muchos “consejos” acerca del tema.

En su cuenta de Facebook había chats con personas desconocidas que le daban consejos de como cortarse. También seguía varios blogs y páginas llamadas “ángeles que quieren volver a casa”, en su mayoría escritos por jóvenes que describen sus vidas como muy tristes, en soledad, con muchos problemas y que luchan día a día contra el deseo de quitarse la vida.

Yo busqué información al respecto y encontré mas de 300 mil páginas web y perfiles de Facebook que se autodenominan comunidades de apoyo. Se unen, cuentan sus problemas y se apoyan entre sí cuando se autolastiman. Ven este problema como una droga. Incluso cuando han dejado de hacerlo, dicen que están limpios.

Estas comunidades son un arma de doble filo, pues comparten fotografías de sus cortes, pensamientos depresivos y estados de ánimo negativos. Esto puede conllevar a sentirse más deprimidos e incomprendidos.

La primera reacción de mi amiga fue de enojo. Después de tranquilizarse, tuvo una larga conversación con su hijo, quien se abrió por completo y le contó todo lo que le sucedía. Mi amiga descubrió con un poco de paz que él lo había hecho más por curiosidad que por un sentimiento autodestructivo. También descubrió que varios compañeros y compañeras del colegio lo hacían. Se había convertido en una moda.

Por qué se cortan
Según la American Association for Marriage and Familiy Therapy (AAFM), el hacer pequeñas heridas en el cuerpo produce endorfinas provocando una sensación de relajación y puede ser que la persona olvide momentáneamente sentimientos desagradables. Algunos jóvenes recurren a este método para dejar de lado sus problemas.

En Gran Bretaña la Fundación Camelot realizó una encuesta nacional sobre la autoflagelación y descubrió que uno de cada diez jóvenes se lastimaba. Psicólogos aseguran que esto puede suceder con más frecuencia en adolescentes, ya que es una etapa de cambios difíciles.

Qué hacer?
1. Lo primero por hacer es informarse. Es un tema muy amplio y hay varios sitios serios que pueden darle una buena orientación al respecto.

2. No regañe o castigue a su hijo. Hable con él y pregúntele qué le sucede. Seguramente usted encontrará una razón profunda que explique esta conducta.

3. Busque ayuda profesional.

4. Haga que sus hijos se sientan amados y con la libertad de poder hablar con usted de cualquier tema.

5. Esté atento a cambios conductuales en sus hijos. Quienes suelen cortarse tapan sus heridas con relojes grandes, mangas largas o muchas pulseras.

6. Revise con frecuencia los sitios que sus hijos visitan y revise sus actividades en la web.

7. No eche la culpa a internet o a las aplicaciones. Estas son buenas herramientas. De nosotros depende darles un buen uso.