Carchá, noviembre 2013.- Se ha inaugurado y bendecido una nueva iglesia en la comunidad rural de Chitocán, gracias al esfuerzo de los pobladores como de bienhechores.

Esta nueva iglesia es un signo visible del crecimiento numérico y cualitativo de las comunidades cristianas de la misión salesiana en Carchá, al norte de Guatemala.

Gracias a una pastoral inteligente centrada en el liderazgo local, el uso litúrgico de la lengua qeqchí y la inculturación de la fe, la iglesia en ese mundo indígena se ha ido consolidando como una iglesia fuerte con rasgos propios.

La multiplicación de iglesias en el extenso territorio misionero es un indicador de la maduración de la fe del pueblo qeqchí. Las humildes y frágiles ermitas de otro tiempo han ido dando lugar a construcciones espaciosas y robustas.

En la fiesta de inauguración de la iglesia de Chitocán participó el obispo de la diócesis de Verapaz, mons. Rodolfo Valenzuela, el padre Ovidio Tubac, salesiano animador pastoral de la zona, y toda la población católica de Chitocán.

A los elementos religiosos de la celebración  se añadieron otros propios de la colorida cultura indígena.