Cartago,  7 de julio de 2012.- Cerca de diez mil jóvenes se reunieron en el estadio de la ciudad para celebrar la inauguración del mes de la juventud católica nacional.

Bajo el lema Con Jesús Cero Miedo, los millares de asistentes expresaron su alegría bajo un sol radiante con cantos, hurras y bailes improvisados. La lluvia que cayo a media jornada no deslució el evento ni enfrió los ánimos.

El punto culminante de esa magnifica demostración de fe juvenil lo constituyó la celebración eucarística presidida por el cardenal salesiano Óscar Rodríguez Maradiaga. Asistieron también el nuncio apostólico, varios obispos y numerosos sacerdotes asesores de la pastoral juvenil.

La procesión inicial fue precedida por la venerada imagen de nuestra Señora de los Ángeles, patrona del país e ícono de la identidad nacional.

En su motivadora homilía, el cardenal Rodríguez insistió en que la transformación del mundo depende del testimonio de fe de los jóvenes. Los invito a un encuentro profundo con Cristo para experimentar una genuina liberación, recibir el aliento de la esperanza, descubrir razones para vivir y ver potenciada su alegría.

Esta jornada nacional de la juventud católica fue también la ocasión para el lanzamiento oficial de la invitación a participar en la próxima Jornada Mundial de la Juventud a celebrarse en Río de Janeiro.

Los jóvenes convocados en el estadio provenían de las siete diócesis del país. La iglesia católica en Costa Rica tiene una bien organizada red nacional de pastoral juvenil que se traduce en la formación de numerosos líderes de animación pastoral y de vocaciones a la vida sacerdotal y religiosa.

El movimiento juvenil salesiano nacional participó en el evento integrándose efectivamente en el complejo esfuerzo organizativo que un evento de esa categoría implicaba.

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