sandor Roma, octubre 2014.- El domingo 26 de octubre se conmemora el centenario del nacimiento del Beato Stefano Sándor (26 de octubre de 1914 - 8 de junio de 1953), salesiano Coadjutor, mártir, beatificado el 19 de octubre del año pasado en Budapest.

Se planean varios eventosen Hungría, especialmente en su ciudad natal de Szolnok, que lo venera con gran devoción. Del 23 al 26 de octubre se realizará un encuentro de jóvenes, durante la cual se vuelve a presentarla obra teatral puesta en escena con motivo de la beatificación. También la película sobre él, que ha tenido un apoyo considerable, se proyecta en las salas de cine durante las semanas culturales. Por último, están programados algunos encuentros de carácter histórico y pedagógico.

La coincidencia del centenario del nacimiento de Stefano Sándor con los eventos del año jubilar dedicado a Don Bosco, es una fuerte invitación a ser auténticos hijos de San Juan Bosco. Stefano Sándor era un joven entusiasta de su vocación de salesiano coadjutor: "Yo solía pasar mi etapa del noviciado con la aspiración continua a la vida perfecta, asimilando cada vez más el espíritu de nuestro santo Padre Don Bosco [...]. Es mi firme decisión pasar mi vida de acuerdo con las sagradas reglas, para santificar mi alma y la de los demás, y para implantar en el mayor número de jóvenes almas el blanco estandarte mariano de Don Bosco". Con alegre síntesis, de él se afirma que amaba los libros, el altar y el oratorio.

Merece ser recordado, asimismo, su ansia educadora. Fiel al carisma salesiano, el Beato Sándor no solo fue un maestro tipógrafo de alta profesionalidad, sino también un incomparable maestro de vida. Los estudiantes recuerdan con admiración sus exhortaciones a la vida buena del Evangelio. Estaba justamente convencido de que los jóvenes aprendices, además del oficio de la tipografía, también necesitaban de una educación espiritual. Con su martirio se presenta como un modelo noble del salesiano, fuerte para afrontar las pruebas de la vida, capaz de no desanimarse nunca.

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