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Arte chaleco. Santa Tecla, octubre 2018.-  Cuatro estudiantes de Segundo Año de Diseño Gráfico del Colegio Salesiano Santa Cecilia se unieron para darle vida a un mural que sintetiza la vida de todo estudiante salesiano y específicamente del Chaleco.


Stanley Méndez Renderos, Diego Portillo Cabrera, Melvin Salazar Campos y Dylan Siliézar Duarte son los jóvenes talento que han plasmado la Espiritualidad Juvenil Salesiana en un mural que embellece la entrada de la recién remodelada Cripta María Auxiliadora.
El proceso de elaboración del mural partió de una pintura de María Auxiliadora del Salesiano Luigi Zonta. Los cuatro jóvenes iniciaron el trabajo creativo y decidieron dividir la obra para poder aportar cada uno su estilo. Esta decisión fue trascendental, porque la puesta en común fue lo que más les causó fatiga, aseguraron los cuatro jóvenes.
“Nos distribuimos el trabajo para crear cómo vive un estudiante dentro del colegio. Para realizarlo trabajamos en los recreos, en los cambios de clases, en la noche, etc. Nos reuníamos constantemente para ver cada una de las partes y darle una continuidad”, dijo Portillo Cabrera.
El aporte de Dylan Siliézar Duarte fue plasmar la Eucaristía, el altar de María Auxiliadora, el Templo, con su característico mosaico de Jesús y además inmortalizó al estudiante Andrés Mata, quien murió en el año 2015.
Por su parte Stanley Méndez Renderos elaboró las ilustraciones relacionadas con la música, el cielo, el volcán, los estudiantes y los jóvenes adorando a Jesús Sacramentado.
Diego Portillo Cabrera es el autor de Don Bosco, Domingo Savio, la torre del templo y el teatro del colegio. “Básicamente hice infraestructuras y personajes como los bailarines de la FUCO (Fuerza Coreográfica del Colegio Salesiano Santa Cecilia)”, destacó Portillo Cabrera.
Asimismo, Melvin Salazar Campos realizó la imagen del sacerdote confesando, rostros de algunos estudiantes y el niño de parvularia.
El mural mide 2.80 metros de ancho por 1.60 metros de alto. Posee tonos tierra para matizar con las tonalidades de la Cripta. “Pese a que fue complicado para nosotros, nos gusta dibujar y nos divertimos haciéndolo”, enfatizó Méndez Campos.
El reto de la obra fue la composición de cuatro estilos a uno solo. Los artistas se sienten satisfechos con el trabajo finalizado y están convencidos que de esta forma le han dado a la institución, que tanto aprecian, un poco de su talento.
Sin duda, será un aporte que se preservará con el tiempo y eso los llena de orgullo Chaleco. “Se siente agradable saber que le dejamos una huella al colegio. El que todos los compañeros y demás personas vean el trabajo que realizamos nos llena de satisfacción”, acotó Siliézar Duarte.
El mural está compuesto por 112 cerámicas que fueron impresas con una técnica vanguardista que garantiza su durabilidad.

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