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“Tuve hambre y me dieron de comer. Tuve sed y me dieron de beber”. Cartago, mayo 2021. – El mejor indicador de fe que se puede tener, como dice Santiago en su carta, son las obras. Una realidad mundial que no podemos negar es la situación de pobreza y de hambre que miles de personas pasan. Entre la variedad de propuestas que el Centro Salesiano Santo Domingo Savio ofrece, se encuentra una iniciativa que tiene por objetivo aportar algo para afrontar esta situación.

Hace algunos años, se viene haciendo una iniciativa, que consiste en recolectar víveres entre los mismos feligreses y bienhechores de la obra para beneficiar a algunas familias pobres de Cartago.

Durante todo el mes, los que desean colaborar, se acercan a las instalaciones del centro a hacer su donación que consiste en granos básicos, enlatados, aceite, agua, entre otros. La entrega se hace todos los primeros viernes de mes, conmemorando la misericordia de Dios en el recuerdo del Sagrado Corazón de su Hijo.

Actualmente, esta iniciativa llega a 40 familias de los alrededores de la casa salesiana de las cuales se tiene el debido registro. También se involucran a más personas que pertenecen a la comunidad, como a los miembros de la Asociación de María Auxiliadora (ADMA), quienes se encargan de armar los paquetes que serán entregados a los beneficiados, los mismos trabajadores de la obra y los aspirantes salesianos.

 

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