Rezando Voy Antes de iniciar el trabajo del día, después de correr de un lado a otro por la mañana, después de sobrevivir al tráfico de la ciudad, antes de atender los asuntos pendientes de la oficina, existe un lugar y un momento que me ayuda a silenciar los bullicios externos e internos y meditar el evangelio del día.

Para hacer oración se necesita espacio, tiempo y escucha, pero nunca pensé que encontraría ese lugar en internet.

Acostumbrada a orar en la iglesia, en una capilla o en la oscuridad de la noche antes de dormir, nunca pensé que el teléfono, o la computadora y un par de audífonos pudieran convertirse en mi capilla virtual todos los días.

Son doce minutos que me guían por la meditación del evangelio diario con un lenguaje actual, inspirado en la vida cotidiana. Doce minutos que me ayudan a transportarme a los pasajes de la vida de Jesús y luego me invitan a traducir sus enseñanzas a mi vida actual.

La voz que narra las lecturas y me inicia en la meditación del texto se convierte en una amiga que me toma de la mano y me guía a entablar un verdadero diálogo con Dios, a plantearle mis incertidumbres, mis dudas, mi fragilidad, mi gratitud.

Rezandovoy.org es un sitio web y una app que puede descargarse en dispositivos móviles y que ofrece a sus usuarios los textos de la sagrada escritura, música, cantos, silencio y preguntas para la reflexión.

El usuario escoge el momento y el lugar para rezar y los textos van de acuerdo a los tiempo litúrgicos del año. Además, ofrece la posibilidad de descargar en un solo archivo las oraciones de toda la semana. Dispone también de un espacio particular para que los niños vayan descubriendo el sabor de la oración.

En general, las aplicaciones móviles son herramientas que han sido creadas para facilitar las actividades de la vida diaria de las personas. Quién iba a pensar que esta aplicación en particular me ayudaría a profundizar en mis momentos de oración.

Rezando voy es mi fuente de agua fresca en ese torrente de información al que llamamos internet.


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