Nació en Granada, Nicaragua, el 13 de enero de 1902 y murió en Las Peñitas, León el 7 de julio de 1977. Tenía 75 años de edad.

A los 18 años viaja a El Salvador para incorporarse al noviciado en la Congregación de las Hijas de María Auxiliadora.

Sus habilidades para el piano y la pintura le resultaron de gran utilidad para su servicio educativo en los colegios de su congregación tanto en Nicaragua como en Costa Rica.

Sor María sabe comunicar a sus alumnas la pasión por el apostolado. Es entonces que nacen las “misioneritas”, alumnas que visitan los barrios más pobres para evangelizar familia por familia.

Un paso más será la creación de los oratorios o reunión de fin de semana de muchachos y muchachas de los barrios pobres para la diversión y formación cristiana.

Vivió 46 años en Costa Rica dedicada preferentemente al servicio de los más necesitados. Consultorios médicos, internado para jovencitas, capacitaciones en oficios para las mujeres, construcción de viviendas para quienes vivían en lugares precarios, distribución de alimentos y ropa a personas necesitadas son algunas de las múltiples acciones de ayuda que sor María Romero emprendió con ayuda de laicos voluntarios y donaciones.

Su esperada beatificación se celebró el 14 de abril de 2002.  Es la primera mujer centroamericana que recibe ese honor eclesial.

Los restos de Sor María Romero descansan en un mausoleo construido en la Casa de María Auxiliadora por ella fundada.  
El 27 de agosto de 1968 la Unión de Mujeres Americanas la nombró “mujer del año”.